“No eres tú lo importante, sino la vida que se manifiesta en ti a través de tus actos”
En muchas religiones, el voto de pobreza representa un elemento muy importante para las personas comprometidas o consagradas, este es visto como una especie de etapa de sufrimiento y sacrificio en la cual una persona se desprende de las posesiones materiales e incluso utiliza vestimentas que reflejan total austeridad.
La razón por la cual esta es una práctica tan exitosa entre las religiones, es porque quienes la llevan a cabo aseguran experimentar un acercamiento intenso a dios, y una sensación de paz interior que les libera del mundo terrenal. La realidad desde un plano más espiritual y menos religioso, es que la dependencia a las posesiones y el desprenderse de ellas ocasiona gran sufrimiento, pero solo durante la transición en la que la persona finalmente entiende que no necesita nada más que la existencia, una vez asimilado esto, se es totalmente libre de sufrimiento, pero, ¿Por qué esta idea no nos ha alcanzado a todos?...
Porque aún los nobles votos de pobreza, sean de la religión que sean, se encuentran atados al “mundo terrenal”.
El origen espiritual de los votos de pobreza es la desidentificación de los conceptos, no solo de las posesiones materiales, de hecho debemos saber que no es necesario deshacerse de las cosas para desidentificarse de ellas. Los votos de pobreza cubren solamente la parte exterior de la desidentificación, la parte más visible, la punta del iceberg. Existen personas que en el exterior parecieran estar totalmente desprendidas de las posesiones materiales, pero que en realidad siguen atados al sufrimiento, pues se encuentran estrechamente identificados con su rol de austeridad.
La desidentificación total es lo único que puede liberarnos… Y a todo esto, ¿Qué es la desidentificación?
La desidentificación como es obvio, es lo contrario a la identificación, la identificación va muy de la mano con la conceptualización (entrada del blog de Octubre) Desde que nacemos nos identificamos con nuestro estatus social, con nuestra imagen física, con nuestros roles en una familia o grupo, nos identificamos con un código de creencias, ética y moral determinado, con un carácter o personalidad específica, nos identificamos con miles de conceptos que no hacen más que comprometer nuestra existencia e incomodar nuestra naturaleza humana, y esto se debe a que ninguna de las cosas con las que estamos tan fervientemente identificados son reales, todas y cada una de ellas son impuestas a lo largo de nuestra vida de una u otra forma. “El comportamiento del ser humano es el producto de los estímulos a los que ha estado expuesto durante su vida”
En el plano de la conceptualización, el concepto de la posesión o pertenencia es claramente una fuerte forma de identificación (este es “mi” auto, “mi” juguete, ese es “mi” estilo, “mi” forma de hacer las cosas, ella es “mi” novia, etc.). Debemos entender que las cosas no le pertenecen a la gente, las cosas simplemente están ahí, y el hombre saca provecho de ellas mientras están a su alcance (desde cosas hasta belleza, facultades físicas y mentales). Las posesiones nunca se pierden, pues nunca se tuvieron realmente, las personas que no entienden esto sufren fuertemente.
Algunas personas están tan identificadas con su rol de padres de familia, que solo actúan como tales, otros también creen que sus hijos les pertenecen, y lo único que logran con esto es incomodar y comprometer su relación natural como seres humanos (la relación mas real, bella y sincera que dos personas pueden tener), lo mismo puede suceder con muchos noviazgos, matrimonios y amistades, cuando estos “pierden” a la otra persona sufren, y solo entonces se dan cuenta de que nunca les pertenecieron. Padre, amigo, esposo e hijo solo son conceptos.
La desidentificación del pasado, es la base para el concepto del perdón de los pecados en las religiones cristianas. No somos una persona renovada porque dios nos perdona, sino porque nos damos cuenta de que lo que hicimos en el pasado no es lo que realmente somos en el presente, así como tampoco somos lo que nos pasó, ni el lugar en el que alguna vez nacimos o vivimos. Fernando Cobos no es más que un nombre, México es solamente una posición geográfica, y no puedo dejar que estos conceptos comprometan mi presente de ninguna manera, de esta forma soy libre y nada me ata o limita. El estar identificado con el pasado es comúnmente llamado predisposición, y solo ocasiona que la gente vaya temerosa e insegura por la vida. La confianza, inspiración y creatividad solo surgen a través del presente.
Para saber que tan dependiente a la identificación eres, pregúntate a ti mismo que tanto sufrirías si perdieras esto o el otro, no solo posesiones materiales, sino también conceptos como un puesto de trabajo, comodidades, seres queridos, capacidades físicas, oportunidades o todo aquello que se pueda “perder”. En la medida en que más desidentificado estés, menos será tu sufrimiento, más feliz, pura y libre será tu existencia. Debemos saber que la existencia es lo único que jamás nos defraudará, y por suerte, lo único real.
“Desnudos nacimos, y desnudos hemos de volver a la gran máquina vital”
- Fernando Cobos -
Fer.. que bonito escribes... otra vez mas gracias por lo que aportas a mi vida.. eres una exelente persona y el mundo es mejor gracias a personas como tu.. te quiero mucho brother....
ResponderEliminarFer: Yo creo que mientras mayores somos mas trabajo nos cuesta desidentificarnos con todo, por muchas razones, especialmente porque cuando somos padres nos identificamos como "papa o mama de Fernando" o "abuelo de Josep"...... me explico? los seres queridos nos hacen arraigarnos a ellos, pero coincido contigo en que las cosas materiales no deben atarnos. Y que la sola existencia basta para ser felices, siempre y cuando estes satisfecho con lo que tu eres.
ResponderEliminarUFFFF, la verdad es que creo que debemos hablar un poco mas sobre este tema tu y yo, porque me parece que se han dejado algunos espacios en blanco.
ResponderEliminarDe cualquier manera, me parece que el principio de tus conceptos son ciertos e irrefutables.
Espero tomarme una "chela" contigo pronto para platicar.
Me encanto este PENSAMIENTO RECICLADO...Te felicito.
hola, estaba navegando por aqui y me tope con tu blog, me encanto, tantas veces e tenido ese sentimiento de desprendimiento y muy fuerte hasta hacia mi madre (claro que ese sentimiento duro poco tiempo porque mi conciencia no me lo permitia) pero sigo amando a mi madre como es, como ser humano (como u dices) a pesar (o gracias a) de ese sentiemiendo. Mi nombre es sofia y me gusta creer que la etimologia de mi nombre tiene que ver conmigo aunque se que no es asi.
ResponderEliminarHola Fer, como siempre muy interesante aportación de ideas, en esta sociedad carente de "gente pensante".
ResponderEliminarLos votos de pobreza en el sentido original, fueron una respuesta radical cuando Roma se hizo cristiana: surgen dos posturas en este sentido, los cristianos "de hecho" y los cristianos "de derecho". Los primeros pretenden seguir a Cristo en su radicalidad, en el origen evangélico (el Hijo del Hombre no tiene ni dónde reclinar la cabeza...) y de las primeras comunidades cristianas que todo lo tenían en común... Qué paradoja, los comunistas hubieran envidiado esto, ¿no crees?
La postura oriental, especialmente la budista, tiene un sentido más antropocéntrico, es decir, el apego, el deseo, es causa de sufrimiento... Si deseamos las cosas que no podemos tener, sufrimos... El hombre es el único animal que se crea sus propias necesidades. Tenemos en realidad más de lo que necesitamos y resulta, muchas veces, hasta terapéutico consumir, comprar.... Nuestro mundo tiene un diseño de ésta manera... ¿cómo ir en contra de la corriente? ¿Podrías tú ir en contra del consumismo?
Por otra parte, quiero comentarte una inquietud que me ha surgido en estos días. No es una idea original, la ví y escuché en un medio de comunicación. Un grupo de jóvenes de universidades públicas y privadas, realizarán una marcha en protesta por la delicuencia y violencia desatada en nuestro México en los últimos años. Esto, principalmente generado por la muerte de los estudiantes del Tec de Monterrey.
¿Te interesaría este tema? ¿Sería factible generar un movimiento universitario de similar manera en Cancún?
Te mando un abrazo y estamos en contacto.